ALBERGUE JUVENIL
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Moderne und recht gut besuchte Einrichtung mit fast 90 Schlafsaal-, Doppelzimmern mit gutem Empfang in Granada
Wenn man unbedingt in einer offiziellen Jugendherberge übernachten will... Aber in Granada ist das angesichts des blühenden Angebots an alternativen Herbergen vielleicht nicht die beste Lösung. In der Nähe des Camino de Ronda in einer unspektakulären Gegend liegt sie ziemlich weit vom historischen Zentrum und den Geschäften entfernt, dafür aber näher am Bus- und Bahnhof, was praktisch ist, wenn man die Umgebung bequem mit öffentlichen Verkehrsmitteln erkunden möchte. Diese moderne und recht wenig frequentierte Einrichtung verfügt über fast 90 Schlafsaal-, Doppel- oder Dreibettzimmer, einen guten Empfang und ein Frühstück.
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Meinungen der Mitglieder zu ALBERGUE JUVENIL
Die nachstehenden Bewertungen und Meinungen geben die subjektiven Meinungen der Mitglieder wieder und nicht die Meinung von Le Petit Futé.
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Si tuviese que poner alguna pega sería que el baño huele un poco a tubería, pero no es molesto. El desayuno es un poco escaso pero no está mal para lo que es.
Barrio marginal y muy poco seguro, hemos tenido problemas de acoso callejero en la zona. El personal de recepción nos ha causado muchos problemas como obligarnos a dejar la llave de las habitaciones en una caja en recepción y no permitirnos entrar al albergue por unos daños causados por otros clientes. Nos reclamaron haber movido un colchón en nuestro segundo día cuando el día anterior nos lo habían permitido ya que habían tenido ellos un problema de organización. El personal de limpieza no nos proveyó de toallas limpias y papel higiénico haciéndonos bajar a recepción a pedirlo por nosotros mismos. A parte de esto al hacer el check-out no se ciñeron a nuestros horarios y cuando una de nosotras le pidió a una limpiadora que no entrara le faltó al respeto diciendo “esta tía es g1l1poll4s” Las cocineras y el personal del comedor eran unas personas muy desagradables.
Las instalaciones del establecimiento no eran las mejores, el ascensor se quedaba pillado y daba problemas aunque las zonas comunes no estaban tan mal. Las habitaciones eran muy pequeñas para las 4 personas que éramos y las escaleras de las literas una tortura. Muy finas y redondas para subir con pies descalzos. El baño extremadamente pequeño y con una instalación de tuberías muy poco eficiente. Cada vez que usábamos el lavabo acababa el baño encharcado y lo mismo cuando nos duchábamos ya que la mampara de la ducha no estaba bien.
Como este albergue resulta servir también de refugio estaba lleno de personas inmigrantes. Algunas de estas con muy mal aspecto. Una noche tuvo que intervenir la policía dado a que se dieron robos por algunas de estas personas.
Pésima experiencia no volvería. Mala relación calidad-precio